La nueva planta fue construida por la empresa AESA y cuenta con una capacidad de tratamiento de 12.000 metros cúbicos diarios. Durante su pico de construcción, generó más de 500 empleos y requirió la participación de una decena de compañías subcontratistas. Su puesta en funcionamiento se enmarca en el plan 4x4 de YPF, cuyo objetivo es incrementar la producción de petróleo mediante una mayor eficiencia y la expansión en mercados internacionales.
Esta nueva instalación se suma a otra de similares características que ya opera en La Amarga Chica, un bloque que experimentó un notable crecimiento en 2024. Se trata del tercer yacimiento de shale oil más productivo del país, y en esta planta también se tratará el crudo de bloques vecinos como Aguada del Chañar.
En paralelo, YPF completó a fines del año pasado la construcción del Oleoducto Vaca Muerta Norte, que cuenta con 151 kilómetros de extensión y atraviesa 16 áreas productivas hasta llegar a Puesto Hernández. Esta obra fortaleció la capacidad de exportación del Oleoducto Trasandino, permitiendo el transporte de crudo hacia Chile.
El oleoducto tiene una capacidad de transporte de 160.000 barriles diarios y una playa de tanques con una capacidad de almacenamiento de 370.000 barriles. Además, está conectado con el complejo de Luján de Cuyo, en Mendoza, una de las refinerías más importantes del país.
La alianza entre YPF y Petronas se mantiene firme desde su firma en 2014, cuando ambas compañías acordaron desarrollar La Amarga Chica. En 2016 iniciaron el desarrollo masivo del bloque, convirtiéndolo en el tercer productor de shale oil de Argentina, tras Loma Campana y Bajada del Palo.
En enero de 2025, La Amarga Chica alcanzó una producción de 65 metros cúbicos diarios, lo que representó un crecimiento interanual del 9,4%. Durante 2024, la inversión en el bloque superó los 1.000 millones de dólares, de los cuales el 70% se destinó a la perforación de nuevos pozos para sostener el nivel de producción.
Buena parte del crudo extraído en esta región se destina al mercado de exportación, que en 2025 representará el 45% de la producción total de la Cuenca Neuquina. En este contexto, Petronas se beneficia del Decreto 929/2013, que le permite exportar el 20% de su producción sin tributar impuestos y mantener las divisas generadas fuera del país.
A pesar del éxito de esta sociedad en Vaca Muerta, Petronas decidió retirarse del ambicioso proyecto Argentina LNG, cuyo objetivo era transformar al país en un exportador clave de gas natural licuado. La iniciativa contemplaba la construcción de tres gasoductos y una megafactoría onshore en Río Negro, pero la petrolera malaya optó por no continuar.
El proyecto de licuefacción en Sierra Grande sigue en marcha con la incorporación de un nuevo socio. La idea original era aprovechar la experiencia de Petronas en GNL y su capacidad para agregar valor a los recursos no convencionales, pero la empresa ha decidido mantener su enfoque en la producción de shale oil.
Actualmente, Petronas se posiciona como la quinta productora de shale oil en Argentina, con una administración de 33.000 barriles diarios en 2024. Se ubica por encima de compañías como Equinor, Pan American Energy, Tecpetrol, Phoenix Global Resources y Pluspetrol.
Con más de 50 años de trayectoria, Petronas se ha destacado en la explotación offshore y en la operación de plantas de GNL. Su actividad también abarca el sector petroquímico, la producción de derivados del petróleo y, recientemente, el desarrollo de energías renovables.
YPF y Petronas refuerzan su alianza con una nueva planta en Vaca Muerta
YPF ha puesto en marcha la segunda planta de tratamiento de crudo en el yacimiento La Amarga Chica, consolidando su asociación con la petrolera malaya Petronas en Vaca Muerta. Esta ampliación, que implicó una inversión de 200 millones de dólares, busca duplicar la capacidad de tratamiento del bloque y aumentar en un 25% la capacidad de procesamiento total de la compañía en sus desarrollos no convencionales.