Los supercapacitores, esenciales en equipos que requieren alta potencia de arranque como celulares, computadoras y autos eléctricos, complementan a las baterías tradicionales proporcionando energía rápidamente cuando se necesita. Actualmente, la mayoría de los carbones activados utilizados en supercapacitores son importados y no sustentables. Las científicas buscan sustituirlos con opciones ecológicas y nacionales, aprovechando residuos industriales vegetales.
Florencia Jerez, ingeniera de la Unicen, destacó que el objetivo es reemplazar los carbones activados importados con aquellos producidos localmente a partir de residuos abundantes en la región, que además presentan mejores prestaciones. Esta iniciativa no solo busca reducir la dependencia de importaciones, sino también promover la sostenibilidad al utilizar residuos de cáscaras de frutas, verduras, poda de olivo, rastrojo de trigo y maíz.
A finales de 2023, las investigadoras recibieron un subsidio nacional para montar una planta piloto junto a la empresa sanjuanina CanMe, que elabora aceite de cannabis medicinal. Sin embargo, la actual gestión de Innovación, Ciencia y Tecnología aún no ha liberado los fondos adjudicados, poniendo en riesgo la escala del proyecto.
El grupo de trabajo, formado en 2019 entre el Núcleo de Investigación Tecnológica en Electricidad y Mecatrónica, el equipo de Universidad y Cannabis de la Unicen, y científicas del Instituto de Ingeniería Química de la UNSJ, ha evaluado diversas opciones de residuos vegetales gracias a la colaboración con empresas privadas, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). A pesar de la distancia, el equipo ha logrado avanzar significativamente en sus investigaciones.
El proyecto se enmarca en un contexto de crecimiento de la industria del cannabis medicinal en Argentina, con iniciativas tanto en Buenos Aires como en San Juan para valorizar los residuos generados. Sin embargo, la continuidad del impulso gubernamental para el cannabis medicinal es incierta bajo la nueva gestión nacional, que aún no ha entregado los subsidios adjudicados y ha visto la renuncia de miembros del directorio de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación.
El desarrollo de supercapacitores con residuos de cannabis no solo tiene el potencial de impulsar la industria tecnológica argentina, sino que también abre una puerta hacia prácticas más sostenibles y económicas. Al aprovechar residuos vegetales, se reduce la necesidad de materiales importados y se promueve una economía circular donde los desechos se transforman en recursos valiosos. Esta innovación es crucial en un mundo que busca alternativas más ecológicas y responsables en el manejo de recursos naturales.
Sin embargo, la incertidumbre sobre la continuidad del apoyo gubernamental plantea desafíos significativos. Las investigadoras necesitan los fondos prometidos para avanzar con la planta piloto y escalar el proyecto. La falta de entrega de subsidios y la inestabilidad en las agencias de promoción de la investigación reflejan un contexto adverso que podría ralentizar o incluso detener este avance científico. Las científicas y la comunidad académica esperan que se reconozca la importancia de este proyecto no solo para la ciencia y la tecnología, sino también para el desarrollo sostenible y la independencia tecnológica del país.
Con información de la Agencia de Noticias Científicas.
Científicas argentinas desarrollan supercapacitores con residuos de cannabis
Especialistas de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (Unicen) y la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) están llevando a cabo un innovador proyecto que utiliza residuos de la industria de cannabis medicinal para diseñar supercapacitores, dispositivos de almacenamiento que guardan y liberan energía rápidamente. Con tallos, hojas y raíces de cannabis Sativa L., las investigadoras están creando carbones activados, un material poroso clave en estos dispositivos, que facilita la carga y descarga de energía según las necesidades.