El proyecto fue posible gracias a la visión y perseverancia de los líderes de Cuecca, como su presidente Ángel Echarren y el ingeniero Marcelo Martiarena. Ambos destacan que uno de los principales desafíos fue la falta de redes de transmisión adecuadas en Argentina, un problema que afecta a muchas regiones que buscan generar energía renovable. Sin embargo, el molino de Castelli está demostrando ser un éxito en cuanto a captación de vientos, lo que ha alentado a la cooperativa a pensar en la creación de un parque eólico en el futuro.
Cuecca, que lleva más de 60 años brindando servicios a la comunidad, no solo ha avanzado en el ámbito energético, sino que también ofrece servicios esenciales como agua potable, cloacas, TV cable, internet y hasta un banco ortopédico. A pesar de las dificultades financieras que atraviesa, especialmente desde la pandemia, la cooperativa sigue apostando por el cooperativismo como un modelo de gestión enfocado en el bienestar de la comunidad. El sueño de tener un parque eólico propio sigue presente, con la meta de lograr el autoabastecimiento energético y, eventualmente, replicar el proyecto en otras localidades.
Castelli, un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires, ha dado un importante paso hacia la transición energética con la instalación de un aerogenerador fabricado por una empresa argentina. Este molino, ubicado en el paraje Cerro de la Gloria, tiene la capacidad de cubrir hasta el 20% de la demanda energética local, lo que lo convierte en un hito para la Cooperativa de Usuarios de Electricidad y de Consumo de Castelli (Cuecca). La cooperativa, que nació hace casi siete décadas con el objetivo de llevar electricidad a la comunidad, hoy apuesta por las energías renovables para avanzar hacia la sostenibilidad.
El proyecto del aerogenerador comenzó en 2004, pero no fue hasta junio de 2023 que la comunidad vio los frutos de este esfuerzo. El ingeniero Marcelo Martiarena, a cargo de la parte técnica, destacó que el molino ha cumplido con las expectativas, captando de manera eficiente los vientos de la región. Si bien este avance ha sido significativo, los responsables de Cuecca ya están pensando en una meta más ambiciosa: la creación de un parque eólico, con la esperanza de instalar entre seis y diez molinos adicionales que permitan lograr el autoabastecimiento energético del pueblo.
A pesar de las dificultades económicas y la necesidad de inversiones adicionales, los directivos de la cooperativa están convencidos de que su modelo puede ser replicado en otras localidades. La posibilidad de que varias cooperativas se agrupen para crear redes de generación comunitaria es vista como una solución viable para la crisis energética que enfrenta Argentina. Según Ángel Echarren, presidente de Cuecca, el cooperativismo es la mejor herramienta para garantizar que los proyectos energéticos beneficien a la comunidad y no se vean afectados por intereses económicos externos.
Castelli, un pueblo eólico con visión de futuro (y compromiso con la energía sustentable)
Castelli, un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires, ha dado un paso importante hacia la transición energética con la instalación de su primer molino eólico, impulsado por la Cooperativa de Usuarios de Electricidad y Consumo de Castelli (Cuecca). Este aerogenerador, fabricado por la empresa argentina NRG Patagonia, tiene la capacidad de cubrir hasta el 20% de la demanda eléctrica de la localidad en sus mejores condiciones. La iniciativa, que comenzó a gestarse en 2004, finalmente se concretó en junio de 2023, y marca un hito para la comunidad de 10.517 habitantes.