En cuanto a la inversión necesaria, Mir indicó que aún faltan estudios definitivos, pero se estima que el costo para desarrollar ambos proyectos podría superar los US$ 7 mil millones. A pesar de los altos montos involucrados, Lundin ya ha tomado la decisión de avanzar con la construcción y operación de los mismos, a la vez que destacó la importancia de la asociación con BHP en este proceso.
Un factor determinante para continuar con el proyecto ha sido la implementación del Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) en Argentina, aprobado bajo el gobierno de Javier Milei. Este régimen brinda estabilidad de inversión, un aspecto clave que había sido difícil de concretar con administraciones anteriores. El Grupo Lundin ya se encuentra tramitando su aplicación al RIGI, lo que permitirá avanzar con mayor seguridad.
El desarrollo de Filo del Sol, cuya estructura geológica se extiende entre Chile y Argentina, plantea desafíos tributarios en el marco del Tratado Binacional. Aproximadamente el 40% del depósito se encuentra en territorio chileno, lo que requerirá acuerdos sobre cómo procesar y tributar el mineral extraído en cada país. Sin embargo, el tratado facilita la resolución de estos temas a través de una comisión binacional.
Mir también resaltó la infraestructura disponible en ambos países, incluyendo la cercanía del puerto chileno del Pacífico a tan solo 180 km del yacimiento, en comparación con la mayor distancia hacia el Atlántico argentino. Además, se mencionó la posibilidad de utilizar agua desalada desde Chile para los proyectos, lo que podría ser viable gracias a una planta existente en Candelaria, que necesitaría ser ampliada.
Este avance no solo beneficia a Filo del Sol y Josemaría, sino que también podría impulsar otros proyectos de cobre en Argentina, como Taca Taca, El Pachón y Los Azules, según aseguró Mir. La entrada en producción de estos proyectos no solo consolidará a la región como un actor clave en la minería mundial, sino que también generará un impacto significativo en la creación de empleo y el desarrollo de servicios en ambos países.
El desarrollo de Filo del Sol y Josemaría representa una apuesta ambiciosa por parte del Grupo Lundin, con miras a posicionar a ambos yacimientos como referentes en la minería mundial. La riqueza mineral de Filo, con leyes de cobre impresionantes como un sondaje de 800 metros al 1,8%, es uno de los puntos clave que respalda esta inversión masiva. Josemaría, por su parte, está listo para ser construido, lo que hace que estos proyectos sean considerados estratégicos tanto para la industria minera argentina como chilena.
El desafío logístico también es considerable. Uno de los principales aspectos a resolver será el transporte del mineral, con alternativas que incluyen trasladarlo desde Argentina hacia Rosario mediante camiones y ferrocarriles, o aprovechar la proximidad de la costa chilena del Pacífico. Este aspecto no solo involucra la infraestructura minera en sí, sino también una amplia red de servicios que ya está presente en Chile, y que podría generar un impulso económico significativo en la región. A esto se suma la posibilidad de ampliar el sistema de agua desalada desde Candelaria, un recurso vital para sostener la producción en zonas de alta altitud y sin acceso natural al agua.
Además, la sinergia entre Argentina y Chile no se limitará a la extracción de minerales. Como destacó Pablo Mir, estos proyectos se enmarcan en una serie de iniciativas más amplias que también incluyen a empresas mineras internacionales como First Quantum y Glencore, que están explorando y desarrollando yacimientos cercanos. La colaboración entre ambos países, facilitada por el Tratado Binacional, será clave para resolver cuestiones regulatorias y asegurar un flujo constante de inversiones, fortaleciendo así la posición de la región como un hub minero global.
Grupo Lundin estima una inversión de más de US$ 7.000 millones para los proyectos Filo del Sol y Josemaría
El Grupo Lundin ha revelado detalles clave sobre el desarrollo de los proyectos mineros Filo del Sol y Josemaría en la provincia de San Juan, ubicados en el Distrito Vicuña, tras su reciente acuerdo con la minera BHP. Pablo Mir, director del Grupo Lundin, anunció que la producción de estos yacimientos comenzará en 2030, destacando la magnitud de las reservas de Filo del Sol y el potencial de Josemaría para ser construido de inmediato.