La aprobación de esta ley representa un paso importante en el desarrollo de la industria del GNL en Argentina, con el potencial de atraer inversiones significativas y convertir al país en un exportador de energía. Este proyecto surge en un contexto en el que Vaca Muerta, una de las formaciones de esquisto más grandes del mundo, cuenta con recursos gasíferos que podrían abastecer a Argentina durante 250 años. Se ha establecido el gas como una fuente clave para la transición energética, y la transformación de este gas en GNL permitiría exportarlo a nivel global, no solo a países vecinos.
No obstante, la oposición, representada por Juntos por el Cambio y la izquierda, ha expresado preocupaciones sobre la falta de planificación estratégica y el supuesto mandato exportador impuesto por organismos como el FMI. Los críticos argumentan que se debería haber definido una política energética en base a una planificación estratégica a lo largo de los últimos años. La aprobación del proyecto ahora lo envía al Senado para su consideración y posible aprobación, lo que podría abrir nuevas oportunidades económicas para Argentina en el mercado global de GNL.
El proyecto también establece la necesidad de una inversión sustancial para llevar a cabo las operaciones de licuefacción y exportación de GNL. La primera iniciativa que podría ver la luz es un acuerdo entre YPF y Petronas, que involucra la producción de gas en Vaca Muerta, su transporte a través de un gasoducto de 620 kilómetros y la industrialización del gas. Se estima que esta inversión requerirá al menos 10.000 millones de dólares en la primera etapa, con el potencial de producir hasta 5 millones de toneladas de GNL al año. A largo plazo, se espera que la producción y exportación de GNL alcance más de 25 millones de toneladas al año.
En el debate legislativo, los defensores del proyecto enfatizaron la importancia de esta iniciativa para la economía argentina, destacando la posibilidad de generar superávit y desarrollar la industria energética. Además, se subrayó la importancia de construir gasoductos adicionales para poder exportar GNL a Asia y Europa, lo que requeriría la construcción de tres gasoductos adicionales. El proyecto también incorpora disposiciones relacionadas con el cumplimiento de las obligaciones ambientales para garantizar un desarrollo sostenible de la industria del GNL.