Con la devolución de estos bloques, la Secretaría de Energía ha oficializado la salida de la británica BP del offshore argentino y la reducción de la presencia de Total en la exploración en esta región. Estos bloques habían sido entregados en 2019 y, tras la pandemia, se aprobó una extensión de dos años en el período exploratorio en 2022. Sin embargo, un año después, en agosto de 2023, ambas compañías decidieron renunciar a sus permisos de exploración.
La medida fue formalizada mediante la resolución 159 del Ministerio de Economía, publicada en el Boletín Oficial, donde se declara la extinción de los permisos de exploración de hidrocarburos sobre las áreas CAN 111 y CAN 113, ubicadas en la costa afuera nacional. Voceros de las compañías han calificado la decisión como "puramente técnica" y anterior a los resultados del Pozo Argerich, destacando que ambas empresas no solicitaron una prórroga adicional a sus permisos, como lo habían hecho en 2022.
La devolución de estas áreas se enmarca en un contexto más amplio de evaluación y ajuste de estrategias por parte de las compañías energéticas en el ámbito offshore argentino. El pozo Argerich, que se esperaba fuera un punto de inflexión en la exploración hidrocarburífera en la región, no cumplió con las expectativas, lo que ha llevado a una reconsideración de la viabilidad económica y técnica de continuar con las actividades en estas áreas. Esto refleja una tendencia global donde las empresas están siendo cada vez más cautelosas y selectivas en sus inversiones en exploración, especialmente en entornos complejos y de alto costo como el offshore.
Por su parte, el Estado argentino se enfrenta al desafío de revaluar y posiblemente redefinir su estrategia de explotación de recursos hidrocarburíferos en el Mar Argentino. Con la devolución de las áreas CAN 111 y CAN 113, se abre la oportunidad para atraer nuevos inversores o replantear el enfoque hacia otras formas de energía. Esta situación subraya la necesidad de un marco regulatorio y económico adaptable que pueda responder a los cambios dinámicos del mercado energético global y las expectativas medioambientales crecientes.
La decisión de Total Austral y BP Exploration de devolver sus áreas offshore en la costa bonaerense también resalta la complejidad y los desafíos inherentes a la exploración y explotación de recursos en aguas profundas. Estas operaciones no solo requieren inversiones significativas en tecnología y logística, sino también enfrentan riesgos operativos y ambientales considerablemente altos. La industria energética global está experimentando una transición hacia fuentes de energía más sostenibles y renovables, lo que podría influir en las decisiones futuras de inversión en exploración offshore.
Además, la liberación de estas áreas por parte de Total y BP podría tener implicaciones económicas y estratégicas más amplias para Argentina. La capacidad del país para atraer y retener inversiones en el sector energético es crucial para su desarrollo económico a largo plazo. La revisión de políticas y regulaciones energéticas podría jugar un papel fundamental en la atracción de nuevos jugadores en el mercado, así como en la maximización del potencial de sus recursos naturales.
En última instancia, la devolución de las áreas CAN 111 y CAN 113 destaca la importancia de un enfoque equilibrado entre la explotación de recursos naturales y la sostenibilidad ambiental. Este episodio también subraya la necesidad de una planificación estratégica y una gestión eficaz de recursos para asegurar que las decisiones en el sector energético beneficien tanto a la economía como al medio ambiente a largo plazo.
Mar Argentino: dos nuevas áreas offshore devueltas al Estado Nacional
El Gobierno ha autorizado a las empresas Total Austral y BP Exploration a revertir sus áreas CAN 111 y CAN 113, transfiriéndolas nuevamente al Estado Nacional tras un pago superior a los 13 millones de dólares. Esta decisión se produce después de los resultados desfavorables del pozo Argerich, permitiendo así que dos importantes jugadores de la industria se retiren de sus bloques en el Mar Argentino.