La mesa fue presentada por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales junto a representantes de empresas, sindicatos, municipios y el sector académico. El acta constitutiva establece que la producción convencional tiene un rol estratégico en el desarrollo energético, económico, ambiental y social de la provincia y del país. En ese sentido, se busca articular acciones conjuntas entre todos los actores de la cadena de valor para garantizar la sustentabilidad de la actividad.
Entre los principales ejes, el documento plantea reducir la accidentabilidad, minimizar el impacto ambiental, optimizar el uso de recursos y promover la economía circular en cada etapa de la cadena productiva. El espacio funcionará como ámbito de intercambio de buenas prácticas, unificación de protocolos, monitoreo conjunto y diseño de medidas preventivas con participación de todas las partes involucradas.
A su vez, se destacó la necesidad de proyectar desarrollos de infraestructura que permitan optimizar recursos materiales, energéticos, humanos y logísticos. El objetivo es fomentar la eficiencia operativa, impulsar la innovación tecnológica y sostener la producción en los yacimientos convencionales de gas y petróleo.
El ministro de Energía y Recursos Naturales, Gustavo Medele, afirmó que el desafío requiere inversión y trabajo asociativo. “Generar las condiciones adecuadas: desde incentivos provinciales hasta la optimización de procesos en la industria. El objetivo es claro: reactivar pozos, sostener la producción y cuidar el empleo”, señaló el funcionario.
En paralelo, el gobernador Rolando Figueroa presentó un esquema de incentivos fiscales para acompañar la reactivación. El programa prevé la reducción de regalías —del 18% o 15% al 12%, según corresponda— y la eliminación de Ingresos Brutos para la actividad convencional. A cambio, las compañías deberán reincorporar al personal despedido y mantener los niveles de producción.
El anuncio fue realizado junto a intendentes de localidades petroleras y representantes de operadoras como Bentia Energy, Petróleos Sudamericanos, Ingeniera Sima, Oilstone, Patagonia Energy, PetrolSur Energía, Quintana E&P, Tango Energy, Fluxus y GyP. También participaron autoridades gremiales, entre ellas el secretario general del sindicato de petroleros privados de Neuquén, Río Negro y La Pampa, Marcelo Rucci.
Actualmente, la producción de Vaca Muerta representa el 96% de la cuenca Neuquina, mientras que en 2022 esa cifra era del 89%. El crecimiento del no convencional se explica en parte por la marcada caída de los campos convencionales. Para el gobierno, recuperar esa actividad es clave para diversificar la matriz productiva y fortalecer las economías locales.
Figueroa destacó que la provincia “tiene la responsabilidad de acompañar al sector convencional. Todo el mundo mira Vaca Muerta, pero también debemos atender al convencional, que hoy atraviesa una crisis. Esta mesa se trata de eso: de ver cómo abordamos esta problemática en conjunto”, afirmó.
El programa establece además que las operadoras deberán contratar servicios locales, priorizar pymes neuquinas y utilizar equipos destinados a reactivación, reparación y abandono de pozos. La intención es reducir costos, mejorar la eficiencia y garantizar la sustentabilidad en los campos maduros.
Rucci remarcó la importancia del acuerdo: “El convencional hizo grande esta provincia. No es justo que compañeros con 25 o 30 años de trayectoria quedaran en la calle de la noche a la mañana. Por eso es tan importante que se generen estímulos para las pymes y empresas interesadas en estos yacimientos”.
Las compañías que adhirieron al programa se comprometieron a conformar un comité de gestión que presentará avances mensuales, indicadores ambientales y productivos, y promoverá la adhesión de nuevos actores. También deberán trabajar en conjunto con universidades y centros de investigación para incorporar innovación tecnológica.
El gobierno neuquino destacó que esta iniciativa implica no solo un alivio fiscal para las empresas, sino también un compromiso concreto con el empleo. La expectativa es que la medida genere un círculo virtuoso entre inversión, producción y trabajo, equilibrando el peso creciente de Vaca Muerta con la recuperación de la actividad convencional.
Finalmente, desde la gobernación se subrayó que la Mesa del Programa de Reactivación Hidrocarburífera Convencional constituye un compromiso para fortalecer la competitividad, sostener la producción y generar condiciones favorables para el empleo y la inversión.