El acto se realizó en la ciudad de Cipolletti y contó con la participación del gobernador neuquino Rolando Figueroa, su par rionegrino Alberto Weretilneck, y representantes del gobierno nacional encabezados por la secretaria de Energía, María Carmen Tettamanti.
El nuevo esquema contractual contempla un aumento en las regalías, el cobro de un canon por el uso del agua y la creación de un fondo específico para obras y trabajos de seguridad, destinados a proteger a la población ante eventuales crecidas.
Durante su intervención, Figueroa remarcó que el acuerdo corrige una situación histórica de desigualdad para las provincias productoras y destacó que las regalías pasarán a calcularse sobre el 100% del valor de la energía generada.
El gobernador explicó que anteriormente Neuquén y Río Negro percibían regalías sobre una parte del valor producido, mientras que debían adquirir la energía al precio pleno, una situación que ahora queda corregida con el nuevo esquema.
Figueroa señaló además que ambas provincias continúan aportando al equilibrio macroeconómico nacional, pero reclamó un trato justo y un reconocimiento acorde al valor de los recursos que aportan.
Otro de los puntos centrales del acuerdo es la posibilidad de cobrar parte de las regalías en especie, lo que permitirá conformar una canasta energética provincial y optimizar el uso del recurso en beneficio del desarrollo local.
El mandatario neuquino también destacó la incorporación del canon por el uso del agua, recordando que, desde la reforma constitucional de 1994, los recursos hídricos son propiedad de las provincias.
La firma de los contratos fue calificada como un hecho histórico para Neuquén y Río Negro, resultado de una negociación extensa y compleja entre las provincias y el Estado nacional.
Por su parte, Weretilneck valoró el trabajo conjunto entre ambas jurisdicciones y remarcó que el acuerdo reconoce el aporte histórico del norte de la Patagonia al sistema energético argentino.
Desde el gobierno nacional se destacó el proceso de articulación institucional y el alto interés de las empresas durante el proceso licitatorio, lo que permitió obtener ofertas competitivas.
En cuanto a los montos de las concesiones, Piedra del Águila fue adjudicada por US$ 245 millones a Central Puerto; El Chocón, por US$ 235,6 millones a MSU Green Energy; Alicurá, por US$ 162 millones a Edison; y Cerros Colorados, por US$ 38 millones, también a Edison.
Con estos acuerdos, Neuquén y Río Negro buscan fortalecer la seguridad jurídica, garantizar inversiones de largo plazo y consolidar un esquema hidroeléctrico que reconozca el valor estratégico de los recursos naturales de la región para el desarrollo energético del país.