En números concretos, Neuquén cerró marzo con un promedio de 385.575 barriles diarios, lo que representa un aumento del 1% respecto a febrero y un impresionante incremento del 16% en comparación con el mismo mes del año anterior. Paralelamente, la producción de gas natural alcanzó los 77,6 millones de metros cúbicos por día.
Centrándonos en el petróleo, la producción neuquina representó el 56,9% del total nacional, con un aporte de 677.831 barriles diarios provenientes de todos los yacimientos de Argentina, incluyendo shale, convencionales y offshore.
A pesar de los desafíos macroeconómicos y la escasez de divisas en el país, la actividad en Vaca Muerta se mantiene en un ritmo enérgico. La reciente incorporación de sets de fractura, con diez en operación en la actualidad, es un claro indicador del impulso que busca alcanzar la industria, con el objetivo a corto y mediano plazo de aumentar las exportaciones de crudo.
Dos indicadores clave destacan en el panorama reciente: en febrero se conectaron un total de 42 pozos con el objetivo de explotar Vaca Muerta (25 de ellos enfocados en petróleo), según datos de la consultora Economía & Energía; y marzo cerró con el mayor número histórico de etapas de fractura, con un total de 1643, según la Fundación Contactos Energéticos.
El 93% de la producción petrolera de Neuquén proviene de yacimientos shale, y es en esta dirección hacia donde todas las operadoras están orientando sus esfuerzos, especialmente después de la decisión de YPF de desinvertir en activos de baja productividad convencionales para enfocarse en Vaca Muerta y sus oportunidades de exportación.
A pesar de los desafíos económicos que enfrenta Argentina, Vaca Muerta parece mostrar una notable resistencia, continuando su trayectoria de crecimiento tanto en términos de productividad como de eficiencia. Mientras se desarrollan proyectos de infraestructura como las ampliaciones de los oleoductos Oldelval y Vaca Muerta Sur, la producción de Neuquén continúa su ascenso imparable.
La resiliencia de Vaca Muerta ante los vaivenes económicos del país subraya su importancia estratégica en el panorama energético nacional. Su capacidad para mantener un crecimiento constante a pesar de los desafíos macroeconómicos y la volatilidad del mercado internacional de energía es un testimonio de su potencial a largo plazo. Este éxito también refuerza la posición de Neuquén como un actor central en la industria petrolera argentina, consolidando su liderazgo como la provincia que impulsa gran parte del suministro de energía del país.
El impulso continuo de Vaca Muerta no solo promete beneficios económicos a nivel nacional, sino que también ofrece oportunidades significativas para el desarrollo regional y la creación de empleo. A medida que la industria energética sigue evolucionando en la región, se espera que Neuquén y sus recursos en Vaca Muerta sigan desempeñando un papel fundamental en la transformación del panorama energético argentino y en la búsqueda de la autosuficiencia energética.
Vaca Muerta impulsa otro mes récord para el petróleo neuquino (superando los 400.000 barriles diarios en marzo)
La producción petrolera de Vaca Muerta ha vuelto a marcar un hito, según los últimos datos publicados por la Secretaría de Energía de la Nación. Neuquén, cuya prominencia como la principal provincia productora de hidrocarburos está firmemente establecida, ha dado un paso más hacia la cúspide.