El "Proyecto Andes" es parte de una estrategia más amplia conocida como el "Plan 4x4", diseñado por el CEO y presidente de YPF, Horacio Marín. Este plan busca concentrar inversiones y esfuerzos en la formación de Vaca Muerta, un área con alta rentabilidad y volumen de producción, y desinvertir en yacimientos menos rentables. La meta es transformar a YPF en una compañía de energía de clase mundial y convertir a Argentina en un exportador significativo de hidrocarburos para 2030.
Entre las áreas maduras que YPF ha cedido se encuentran el clúster Mendoza Norte, ahora bajo la gestión de Petróleos Sudamericanos y las áreas de Llancanelo cedidas a PCR. En Río Negro y Neuquén, la operadora Velitec ha tomado control del área Señal Picada/Punta Barda, mientras que Bentia Energy e Ingeniería Sima gestionarán el clúster de Neuquén Norte. En Chubut, PECOM continuará desarrollando las áreas Escalante – El Trébol y Campamento Central - Cañadón Perdido.
YPF destacó que estas cesiones están sujetas al cumplimiento de condiciones comerciales y regulatorias y que se requiere la validación de los gobiernos provinciales para la transferencia definitiva de las áreas. Además, se anticipan nuevas negociaciones por los bloques convencionales restantes que forman parte del Proyecto Andes. En total, se ofrecieron 30 áreas agrupadas en 11 clústeres, recibiendo más de 60 propuestas de compra de 30 compañías nacionales e internacionales. Todo el proceso fue supervisado por el Banco Santander.
El "Plan 4x4" aspira a incrementar las exportaciones de hidrocarburos de YPF a 30 mil millones de dólares para 2029 y aumentar el precio de su acción en Wall Street. Este enfoque busca mejorar la eficiencia y rentabilidad de YPF, priorizando las áreas no convencionales, en línea con las mejores prácticas de la industria petrolera que recomiendan que las grandes compañías cedan yacimientos maduros a operadoras más pequeñas para mantener la continuidad de la actividad sin afectar la paz social.
La implementación del Proyecto Andes y el Plan 4x4, junto con otras iniciativas como la suba de precios de los combustibles y el avance en la sanción de la ley Bases para el desarrollo del plan Argentina GNL, ha llevado a Moody’s a elevar la calificación de deuda y el perfil de emisor de YPF.
La reciente firma de contratos bajo el Proyecto Andes no solo subraya el compromiso de YPF con la optimización de su portafolio de áreas convencionales, sino también con el fortalecimiento de la industria energética argentina en su conjunto. La cesión de yacimientos maduros a empresas más pequeñas permitirá que estas compañías mantengan la producción y aprovechen las oportunidades presentes en estos campos, asegurando así una continuidad en la extracción de hidrocarburos y un aprovechamiento más eficiente de los recursos disponibles. Este enfoque también podría estimular el crecimiento de nuevas empresas en el sector, generando empleo y dinamizando las economías locales de las regiones involucradas.
Por otro lado, el énfasis en Vaca Muerta refleja una estrategia orientada a maximizar la rentabilidad y la eficiencia del capital invertido. Con su potencial para convertirse en uno de los mayores yacimientos de hidrocarburos no convencionales del mundo, Vaca Muerta es el eje central del Plan 4x4 de YPF. La compañía busca no solo aumentar significativamente su producción y exportación de hidrocarburos, sino también posicionarse como un líder en la industria energética global. La proyección de incrementar las exportaciones a 30 mil millones de dólares para 2029 y mejorar sustancialmente el valor de las acciones de YPF en Wall Street son metas ambiciosas que, de lograrse, transformarían el panorama energético y económico de Argentina.
YPF anuncia ganadores del proyecto Andes (y firma primeros contratos para áreas Maduras de hidrocarburos)
YPF ha comunicado la firma de los primeros seis acuerdos del "Proyecto Andes", marcando un hito en la cesión de 15 áreas convencionales de hidrocarburos en las provincias de Río Negro, Neuquén, Mendoza y Chubut. Estos contratos, que se suscribieron tras finalizar el proceso de "due diligence" dentro de los plazos establecidos, representan una oportunidad para que empresas más pequeñas exploten yacimientos que han superado su pico óptimo de producción pero que aún son productivos.