En la última presentación trimestral ante inversores, Pouyanné señaló que las restricciones para repatriar ganancias son un obstáculo para nuevas inversiones en el país. Aunque destacó el reciente inicio de producción del proyecto Fénix en Tierra del Fuego, realizado en conjunto con Pan American Energy y Harbour Energy, subrayó que las actuales limitaciones para girar dividendos afectan las decisiones estratégicas de la empresa.
El interés de Milei por atraer a TotalEnergies al proyecto Argentina LNG se hizo evidente tras la salida de Petronas, la cual enfrenta un plazo límite en diciembre para definir su participación financiera en los trabajos de ingeniería de la planta de licuefacción planificada en Punta Colorada, Río Negro. Pese al contexto de incertidumbre, desde TotalEnergies aseguran que continuarán desarrollando proyectos de gas y petróleo en Argentina, pero recalcan que nuevas inversiones dependerán de mejoras en la política cambiaria del país.
El gobierno de Milei, junto con YPF, sigue buscando nuevos socios para el desarrollo del proyecto de exportación de GNL. Aunque se han mantenido conversaciones informales con potenciales inversores, como Shell, no se ha concretado ningún acuerdo hasta el momento.
Además de los desafíos regulatorios, Pouyanné destacó el potencial energético de Argentina, especialmente en áreas de producción de petróleo aún no explotadas. Sin embargo, advirtió que el atractivo de nuevos proyectos depende en gran medida de la capacidad del país para ofrecer un entorno financiero más estable y predecible. TotalEnergies, que lleva operando tres décadas en Argentina con una inversión anual promedio de 600 millones de dólares, considera que las políticas de restricción cambiaria ponen en riesgo el retorno esperado de capital, lo que limita la expansión de proyectos futuros.
El caso del proyecto Argentina LNG es un ejemplo de la complejidad para atraer inversiones extranjeras en el sector energético argentino. La salida de Petronas ha puesto en evidencia las dificultades que enfrentan las grandes petroleras para comprometer capital en el país, a pesar del gran potencial de los yacimientos. YPF, bajo la dirección de Horacio Marín, sigue buscando alternativas para avanzar con la planta de licuefacción en Punta Colorada, un proyecto clave para transformar el gas natural de Vaca Muerta en GNL para exportación.
El gobierno argentino, por su parte, tiene el desafío de implementar reformas económicas que faciliten el acceso al mercado cambiario y mejoren la confianza de los inversores. Sin estas modificaciones, las posibilidades de atraer nuevas inversiones en GNL seguirán siendo limitadas. La postura de TotalEnergies refleja una tendencia creciente entre las multinacionales del sector, que prefieren esperar a que se den mejores condiciones financieras antes de comprometerse con grandes proyectos en el país.
TotalEnergies condiciona su inversión en GNL en Argentina al acceso al mercado cambiario
El CEO de TotalEnergies, Patrick Pouyanné, dejó claro que la petrolera francesa no evaluará inversiones en proyectos de gas natural licuado (GNL) en Argentina hasta que se normalice el acceso al mercado cambiario. La declaración surgió tras una conversación con el presidente Javier Milei en septiembre, en la que el mandatario sondeó el interés de TotalEnergies para reemplazar a Petronas en el proyecto Argentina LNG de YPF, luego de la salida de la petrolera malaya.