Este proyecto, que también incluye la explotación de vanadio, forma parte del corredor minero Amarillo Grande, una vasta área de 300.000 hectáreas con un alto potencial de exploración. Además de buscar reducir la dependencia argentina de uranio importado, el Proyecto Ivana apunta a fortalecer el suministro energético local, un objetivo clave en la transición hacia fuentes de energía más sostenibles.
El presidente de Blue Sky Uranium Corp, Nikolaos Cacos, destacó que el acuerdo histórico con Corporación América posiciona a ambas empresas para liderar un desarrollo minero de bajo costo que beneficiará tanto al mercado local como al internacional. Según Cacos, el depósito Ivana se perfila como una de las opciones más prometedoras para garantizar suministros energéticos seguros en el contexto global.
Amarillo Grande, que se extiende por 145 kilómetros, ha captado la atención del sector minero por sus características únicas y su potencial estratégico. Además de su relevancia para el mercado nuclear argentino, los recursos del proyecto podrían contribuir a satisfacer la creciente demanda global de uranio, impulsada por la expansión de las plantas nucleares en países como China, Francia y Estados Unidos.
El desarrollo será liderado por el área de energía de Corporación América, que cuenta con experiencia en proyectos innovadores, como la exploración de hidrógeno verde en España. Además, su participación en la Compañía General de Combustibles (CGC) refuerza la capacidad del conglomerado para gestionar iniciativas energéticas complejas y de gran envergadura.
La operación, estructurada bajo el modelo "earn-in", no solo permitirá explorar y desarrollar el depósito Ivana, sino que también incluye una opción para financiar exploraciones en otras áreas prometedoras de Amarillo Grande. Esto amplía significativamente el horizonte de descubrimientos y recursos, consolidando la posición de Corporación América en el sector energético.
El empresario canadiense Joseph Grosso, líder del Grosso Group y propietario de Blue Sky Uranium Corp, ha sido una figura clave en el desarrollo del proyecto. Con una trayectoria de décadas en exploración minera en Argentina, su colaboración con Corporación América representa una alianza estratégica para maximizar el potencial del yacimiento.
El uranio, considerado un pilar esencial para las políticas energéticas sostenibles, se ha convertido en un recurso estratégico para garantizar la seguridad energética. La explotación del Proyecto Ivana no solo busca fortalecer la infraestructura energética argentina, sino también posicionar a Río Negro como un actor clave en la industria global del uranio.
Con esta iniciativa, Corporación América reafirma su compromiso con el desarrollo sostenible, apostando por proyectos energéticos que combinan el aprovechamiento de recursos locales y la reducción del impacto ambiental. El Proyecto Ivana, en este sentido, se presenta como una oportunidad única para impulsar la soberanía energética del país.
La inversión de 160 millones de dólares no solo marcará un antes y un después en la minería argentina, sino que también refuerza la visión de Corporación América de liderar iniciativas innovadoras en el sector energético. Este acuerdo promete no solo generar empleo y desarrollo en la región, sino también posicionar a Argentina como un referente en la producción de uranio a nivel mundial.
Corporación América apuesta al uranio con el Proyecto Ivana en Río Negro
Corporación América ha dado un paso estratégico en el sector energético al adquirir el Proyecto Ivana, el depósito de uranio más importante de Argentina, ubicado en la región de Amarillo Grande, provincia de Río Negro. El acuerdo, firmado con Blue Sky Uranium Corp y su filial Minera Cielo Azul S.A., permitirá al Grupo acceder a una participación inicial del 49,9% mediante una inversión de 35 millones de dólares, con la posibilidad de ampliar su participación al 80% al invertir un total de 160 millones de dólares en los próximos tres años.