La concesión marca el culmen de un proceso de negociación de un año entre el gobierno provincial, administrado a través del Ministerio de Energía y Recursos Naturales, y Pampa Energía SA. Con esta nueva adición, el número total de proyectos de explotación no convencional de esquisto y tight en la provincia alcanza los 47, abarcando colectivamente un área de 9.981,75 kilómetros cuadrados. Impresionantemente, esto representa aproximadamente el 33% de la cobertura total de Vaca Muerta a nivel provincial.
El gobernador Omar Gutiérrez expresó su entusiasmo por el continuo desarrollo de Vaca Muerta, afirmando: "No hay límite para el potencial del desarrollo de Vaca Muerta". Subrayó las ambiciones de la provincia, apuntando a alcanzar una producción de 400.000 barriles de petróleo al día en el año actual y, en última instancia, lograr un hito notable de 1 millón de barriles al día de petróleo y 160 millones de metros cúbicos al día de gas para 2027-2028. Este ambicioso plan implica la explotación masiva del 25% del área total de Vaca Muerta.
El compromiso de Pampa Energía con la nueva empresa es palpable. En la próxima fase piloto de cuatro años del proyecto, se espera que la empresa invierta aproximadamente 161 millones de dólares en operaciones de perforación y producción. Durante esta fase, se perforarán ocho pozos horizontales, cada uno apuntando a la Formación Vaca Muerta. La compañía planea extraer información valiosa de dos pozos piloto inicialmente verticales antes de proceder con su horizontalización. Una decisión estratégica que informará el enfoque adoptado para los pozos restantes.
Además, Pampa Energía tiene previsto completar la perforación y el inicio de operaciones de un pozo adicional, caracterizado por 32 etapas de fractura. Estos esfuerzos requieren una inversión estimada de 149 millones de dólares. Además, la construcción de conductos para facilitar la producción y las adaptaciones a las instalaciones existentes implicarán un gasto adicional de 12 millones de dólares.
Resumiendo las inversiones para la fase piloto, el compromiso financiero total de Pampa Energía se proyecta en alcanzar los 161 millones de dólares. Esto solidifica la dedicación de la compañía para desbloquear el potencial no convencional de la Formación Vaca Muerta y sus reservas de hidrocarburos asociadas.
Mirando hacia el futuro, la fase subsiguiente de desarrollo continuo abarcará la perforación de 135 nuevos pozos horizontales, contribuyendo a un total de 143 pozos. El desembolso financiero para esta etapa se estima en 2.460 millones de dólares.
La asignación de la concesión se alinea con los criterios delineados en las resoluciones N° 53/20 y N° 142/21 del Ministerio de Energía y Recursos Naturales. Ambas resoluciones han sido ratificadas por el Decreto Provincial N° 2183/21.
Además de las perspectivas económicas para Pampa Energía, se espera que esta concesión genere ingresos sustanciales para la provincia a través de regalías recaudadas durante la fase productiva. Además, la compañía está demostrando su compromiso con la responsabilidad social empresarial y la contribución financiera a la economía local. Esto incluye una suma de 5,5 millones de dólares para la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), 13,1 millones de dólares para el Bono de Extensión de Área y 2,2 millones de dólares adicionales para Impuestos de Sellos. En conjunto, estas contribuciones ascienden a 20,8 millones de dólares.
A medida que las ambiciones energéticas de la provincia siguen cobrando impulso, las inversiones estratégicas y los esfuerzos de exploración de Pampa Energía en Vaca Muerta sin duda contribuirán a la seguridad energética y al crecimiento económico de Argentina