El relanzamiento llega tras una alianza con Mirova, que permitió dar origen a un productor independiente de energía con presencia internacional y más de 2.500 MW(p) de capacidad instalada. La unión busca expandir el liderazgo en el mercado global de energías renovables, manteniendo al mismo tiempo un fuerte compromiso con Argentina.
Desde la compañía remarcaron que este cambio de marca no implica modificaciones en su estructura local. “Se mantiene el mismo equipo y los mismos valores que han guiado nuestros proyectos hasta ahora, con una renovada visión local y global”, señalaron.
El proyecto más ambicioso bajo el nuevo nombre es “Gaucho Wind to Hydrogen & Green Ammonia”, que se desarrollará en la provincia de Santa Cruz, cerca de Puerto Deseado y Punta Quilla. Con una capacidad prevista de 8.777 MW de energía eólica, se posiciona entre las iniciativas más grandes del país.
El objetivo es producir hidrógeno verde de manera libre de emisiones, utilizando energía renovable para alimentar electrolizadores de última generación. De acuerdo con las proyecciones de New Energy Argentina, el plan permitirá alcanzar una producción anual de 0,62 millones de toneladas de hidrógeno verde y 3,51 millones de toneladas de amoníaco verde.
La dimensión del proyecto le otorga un potencial estratégico clave. El amoníaco verde se utilizará tanto como materia prima en la industria química como en su rol de combustible de bajas emisiones para transporte marítimo y terrestre.
La ubicación en Santa Cruz representa una ventaja competitiva, ya que la cercanía a los puertos de la provincia facilitará la exportación de la producción hacia Europa, un mercado en plena expansión de las energías limpias.
No obstante, una parte de la producción también será destinada al mercado interno. En sectores como la siderurgia y la petroquímica, el hidrógeno verde se presenta como una alternativa concreta para reducir emisiones y avanzar hacia la descarbonización.
“Gaucho Wind to Hydrogen” tendrá una primera fase con una capacidad de entre 3.000 y 4.000 MW de energía eólica, lo que lo convierte en la gran apuesta argentina dentro de la transición energética global.
La empresa subrayó que el megaproyecto no solo significará un avance tecnológico, sino también una oportunidad para generar empleo, inversión y desarrollo local en la Patagonia.
Con esta iniciativa, New Energy Argentina busca posicionarse como protagonista en el mercado internacional del hidrógeno verde, un segmento en expansión que se perfila como uno de los pilares de la economía energética del futuro.
La estrategia acompaña la visión global de diversificación y sostenibilidad, alineando a la compañía con los objetivos de reducción de emisiones y con las nuevas demandas de los países que avanzan hacia matrices energéticas más limpias.
De esta manera, el cambio de RP Global a New Energy Argentina marca un hito en el camino de la empresa y se convierte en una de las apuestas más relevantes de Argentina para ingresar de lleno en la transición energética global con un proyecto de alcance histórico.
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