Puerto Rosales se transforma: “Rosa Negra” impulsa las exportaciones de petróleo desde Vaca Muerta

El proyecto fortalece a Puerto Rosales como el principal nodo logístico del país para la salida del crudo argentino. En su primera etapa, se construyó un nuevo muelle de 2.000 metros, habilitado para operar buques Panamax, Aframax y Suezmax de hasta 160.000 toneladas. También se incorporaron dos tanques de almacenamiento de 50.000 m³ cada uno, además de sistemas de bombeo, seguridad y control.

Las siguientes fases de “Rosa Negra” prevén la construcción de cuatro tanques adicionales y una tercera posición de amarre, con lo que se alcanzará una capacidad total de almacenamiento de 780.000 m³. Actualmente, la terminal opera con una capacidad de 480.000 m³, lo que evidencia el salto operativo que implica esta ampliación.

Gracias a estas mejoras, la terminal podrá exportar hasta 44.000 m³ de crudo por día y recibir hasta 86.000 m³ diarios. Este nuevo caudal consolida a Puerto Rosales como pieza central del sistema de midstream argentino, con una mayor eficiencia en la cadena de producción y transporte.

La conexión con el sistema de oleoductos de Oldelval resulta clave. Sus proyectos Duplicar Plus, ya inaugurado, y Duplicar X, en etapa de ejecución, permitirán evacuar hasta 665.000 barriles diarios desde Vaca Muerta hacia la costa atlántica. En la actualidad, Puerto Rosales recibe cerca de 60.000 m³ diarios, de los cuales 24.000 m³ se destinan al mercado interno y el resto, 36.000 m³, se exportan.

La puesta en marcha de tres nuevos tanques y del muelle forma parte de un proceso de integración logística entre Otamerica y Oldelval, que permite optimizar toda la cadena de valor: desde la producción y el transporte, hasta el almacenamiento y la exportación. Esto mejora no solo la capacidad operativa, sino también la seguridad, la eficiencia y la sostenibilidad del proceso.

Otamerica adoptó estándares internacionales de operación mediante políticas de higiene, seguridad, medioambiente y capacitación técnica. Su implementación de protocolos HSSE y formación continua para operarios garantiza el cumplimiento de los parámetros globales de la industria energética.

Con esta infraestructura, Argentina amplía su competitividad en mercados clave como Europa, el Golfo de México y África. La empresa también prevé la incorporación de al menos 25 nuevos trabajadores permanentes, muchos de los cuales ya fueron capacitados en terminales del grupo en el exterior, como México.

Actualmente, la terminal de Puerto Rosales despacha entre ocho y nueve buques por mes. Con la nueva estructura, se espera duplicar esta cifra, alcanzando entre 15 y 30 embarques mensuales, según el tipo de buque y la demanda del mercado.

El próximo paso para la terminal será transformar el muelle actual, con forma de “L”, en una estructura en “T”, lo que permitirá operar tres buques simultáneamente. Esta expansión busca reemplazar la antigua monoboya y elevar la capacidad operativa sin comprometer la seguridad.

La ampliación no se detiene allí: también se planea la incorporación de dos nuevas bombas y dos tanques en tierra, en línea con el crecimiento del sistema de oleoductos y el proyecto Duplicar X. Esta infraestructura será clave para absorber el aumento del caudal desde Vaca Muerta.

La modernización de Puerto Rosales se alinea con el desarrollo del Oleoducto Vaca Muerta Sur (VMOS), una iniciativa liderada por un consorcio integrado por YPF, PAE, Vista, Chevron, Shell, Pluspetrol y GyP. Esta sinergia permitirá una red de transporte más eficiente y ágil para el crudo argentino.

Finalmente, la discusión pendiente sobre el dragado del canal de acceso a Puerto Rosales es uno de los desafíos restantes. Actualmente con 13 metros de profundidad, necesita alcanzar los 20 metros para que los buques Suezmax puedan operar a plena carga. La inversión estimada ronda los 100 millones de dólares, clave para optimizar el potencial logístico de la terminal.

El desarrollo de “Rosa Negra” no solo fortalece la infraestructura energética del país, sino que posiciona a la Argentina en una nueva etapa exportadora, con una red integrada, moderna y preparada para competir a nivel global.