Este cambio de denominación responde a un proceso de transformación interna que apunta a un crecimiento sostenido tanto en oro como en cobre. Según Thornton, Barrick está avanzando con su cartera de proyectos estratégicos con el objetivo de aumentar en un 30% su producción de onzas equivalentes de oro para fines de esta década, al tiempo que expande de forma significativa su producción de cobre.
En 2024, la empresa alcanzó todas las metas operativas que se había propuesto, cumpliendo con su guía de producción de oro y cobre y logrando mantener su histórico nivel de reemplazo de reservas. Además, incrementó considerablemente su base de recursos, lo que marca un hito en la consolidación de su plan de crecimiento a largo plazo.
Desde el punto de vista financiero, Barrick también mostró una evolución notable. La compañía registró un aumento del 69% en las ganancias netas, el más alto en los últimos diez años, además de un crecimiento del 20% en el flujo de caja operativo y una duplicación del flujo de caja libre respecto a 2023.
Uno de los focos principales de la estrategia de la minera ha sido el desarrollo de un portafolio que combine sostenibilidad con crecimiento rentable. Entre los proyectos destacados se encuentran la aceleración de la operación en Pueblo Viejo, la fase de prefactibilidad en Fourmile y el reinicio de la mina Porgera.
Asimismo, Barrick completó los estudios de factibilidad de dos desarrollos clave: Reko Diq, uno de los mayores depósitos de cobre y oro aún sin explotar, y la expansión de Lumwana, que está proyectada como una de las minas de cobre más grandes del mundo. Ambos proyectos contribuirán a fortalecer su producción de cobre de forma orgánica.
En ese contexto, la propuesta de modificar su razón social a Barrick Mining Corporation busca reflejar esta nueva identidad de empresa minera integral, que ya no está centrada únicamente en el oro. “Nuestro perfil de producción está cambiando, y el nuevo nombre lo representa mejor”, aseguró Thornton.
A pesar del buen desempeño financiero y operativo, la compañía reconoció que las acciones mineras no lograron acompañar el incremento de los precios de los metales. En respuesta, Barrick recompró acciones por un total de 498 millones de dólares durante 2024 y se mostró dispuesta a continuar con esta política mientras las acciones sigan cotizando por debajo de su valor intrínseco.
Thornton también destacó la fortaleza del balance de la compañía, la amplia liquidez y la calidad de sus activos a nivel mundial. “Estas cualidades, junto con nuestra cartera de crecimiento orgánico totalmente financiada, nos posicionan para aumentar la rentabilidad por acción a largo plazo”, afirmó.
En la misma circular, el director principal Brett Harvey subrayó que la renovación de la junta directiva fue una prioridad durante el año pasado. La intención fue fortalecer la experiencia comercial global de la empresa y lograr una representación más diversa y alineada con las regiones donde opera Barrick.
Con ese objetivo, fueron nominados para integrarse a la junta Ben van Beurden y Pekka Vauramo, mientras que se anunció el retiro de los directores Christopher Coleman y Andy Quinn. Ambos dejarán su cargo tras años de servicio en la compañía.
Finalmente, el consejo también designó nuevos presidentes para sus comités clave: Isela Costantini liderará el comité de compensación, Loreta Silva el de auditoría y riesgos, y Brian Greenspun se hará cargo de los comités de medio ambiente, responsabilidad social, gobernanza y nominaciones. Estos cambios consolidan una nueva etapa para Barrick en su proceso de transformación.
Barrick cambiará su nombre para reflejar su nueva estrategia centrada en el cobre
La compañía minera canadiense Barrick Gold anunció que cambiará su nombre a Barrick Mining Corporation, en un intento por reflejar con mayor precisión su diversificada producción de metales, particularmente el creciente protagonismo del cobre en su portafolio. Así lo confirmó su presidente, John Thornton, en la Circular Informativa 2025 difundida el pasado viernes.