Hill, con 30 años de experiencia en la industria, se unió a Barrick en 2006 y ha ocupado puestos clave en estrategia, desarrollo corporativo y gestión de proyectos mineros de gran escala. Hasta ahora estaba a cargo de las operaciones en Latinoamérica y Asia Pacífico y fue determinante en la decisión de iniciar la exploración en el proyecto Fourmile, en Nevada. Su designación busca garantizar la continuidad en la conducción de la empresa mientras se inicia el proceso de selección de un CEO permanente.
El comité de búsqueda, encabezado por Brett Harvey, contará con el apoyo de una firma internacional especializada en la selección de ejecutivos. La compañía aseguró que el objetivo es encontrar un líder con el perfil adecuado para consolidar los activos de clase mundial que posee Barrick y profundizar su estrategia de crecimiento en oro y cobre.
La salida de Bristow marca el cierre de una etapa que comenzó en 2019, cuando Barrick se fusionó con Randgold Resources, compañía de la que él era CEO. Desde entonces encabezó la integración de ambas mineras y ejecutó una estrategia de inversión que fortaleció la cartera global de activos, con foco en proyectos de alta rentabilidad.
Durante su gestión, Barrick devolvió US$ 6.700 millones a los accionistas y redujo su deuda neta en US$ 4.000 millones. Además, impulsó la expansión en América Latina, África y Norteamérica, al tiempo que consolidó su presencia en proyectos de cobre, un mineral considerado estratégico para la transición energética.
En Argentina, Bristow visitó en varias oportunidades la provincia de San Juan y destacó los avances de Veladero, una de las minas de oro más relevantes del país. También remarcó el potencial del distrito de Iglesia, donde Barrick desarrolla exploraciones junto con sus socios estratégicos.
El propio presidente del consejo de administración, John Thornton, agradeció la labor de Bristow al frente de la minera. “Durante su gestión, Mark fortaleció nuestra cartera y contribuyó a posicionar a Barrick como un productor líder mundial de oro y cobre. La compañía está bien preparada para la siguiente etapa de crecimiento y creación de valor”, señaló.
En paralelo, Thornton destacó la experiencia de Hill y la confianza del directorio en su capacidad para liderar esta transición. “Su conocimiento de la compañía garantiza que mantendremos el impulso y trabajaremos para aprovechar al máximo nuestros activos de clase mundial”, agregó.
El anuncio se produce tras un segundo trimestre positivo para Barrick, con sólidos flujos de caja, un dividendo trimestral mejorado y un buen desempeño en la cotización de sus acciones. Este contexto financiero le otorga margen a la minera para encarar la búsqueda de un nuevo CEO sin sobresaltos inmediatos.
La designación de Hill como CEO interino asegura la continuidad operativa de los proyectos en marcha, incluidos los que Barrick lleva adelante en América Latina. La compañía subrayó que la región, y particularmente Argentina, seguirán siendo parte central de su estrategia de crecimiento.
Con este movimiento, Barrick busca mantener su liderazgo como uno de los mayores productores globales de oro y cobre, mientras encara un proceso de transición que definirá su rumbo en la próxima década. El desafío será capitalizar la solidez financiera alcanzada durante la gestión de Bristow y proyectar a la empresa hacia nuevas oportunidades de desarrollo en un mercado global altamente competitivo.
Tu opinión enriquece este artículo: