Según detalló la compañía en un comunicado oficial, el bono tiene un vencimiento promedio de siete años y devengará una tasa de interés del 8,5% anual. La emisión se realizó en el mercado internacional y representa un paso clave en la estructura financiera de la empresa.
Del total recaudado, Vista destinará 300 millones de dólares a la cancelación de un crédito puente otorgado por el Banco Santander. Este préstamo fue utilizado para concretar la compra del 50% restante del bloque La Amarga Chica, un área estratégica dentro de la formación Vaca Muerta.
Los 200 millones de dólares restantes se invertirán directamente en el desarrollo de los bloques que Vista opera en Vaca Muerta. Esta asignación de fondos confirma el compromiso de la empresa con la producción de hidrocarburos no convencionales en el país.
Vista Energy es actualmente la segunda mayor productora de petróleo y gas no convencional en Argentina. La compañía registra una producción diaria superior a los 110.000 barriles equivalentes de petróleo, de los cuales exporta aproximadamente el 50%.
La formación Vaca Muerta, situada en la provincia patagónica de Neuquén, tiene un rol central en el futuro energético del país. Con una superficie comparable al tamaño de Bélgica, es considerada la segunda reserva de gas no convencional y la cuarta de petróleo a nivel mundial.
El desarrollo de esta formación representa una oportunidad histórica para Argentina en términos de generación de divisas. Las exportaciones de crudo y gas natural licuado (GNL) podrían convertirse en una fuente clave de ingreso para fortalecer la economía nacional.
La decisión de Vista de reforzar su inversión en Vaca Muerta se enmarca en un contexto de creciente interés global por fuentes alternativas de energía. En este sentido, Argentina podría posicionarse como un actor relevante en el mapa energético internacional.
Además del impacto económico, la apuesta por Vaca Muerta tiene implicancias en términos de empleo, infraestructura y desarrollo tecnológico para la región patagónica y el país en su conjunto.
El bono emitido también refuerza la imagen financiera de Vista Energy frente a los mercados internacionales. El acceso al crédito y la confianza de los inversores resultan fundamentales para sostener el ritmo de crecimiento de la compañía.
La cancelación del crédito puente y la capitalización de nuevas inversiones otorgan a Vista una mayor autonomía operativa y una plataforma sólida para futuras expansiones.
Con esta operación, Vista Energy no solo busca incrementar su producción, sino también afianzar su rol como protagonista del desarrollo energético argentino en los próximos años.
La estrategia de la compañía sintoniza con los objetivos del Gobierno Nacional, que ve en Vaca Muerta una vía para equilibrar la balanza energética, promover exportaciones y atraer inversiones de largo plazo.
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