Este crecimiento, que se dio en un contexto internacional desafiante por la volatilidad del precio del crudo y la incertidumbre macroeconómica global, confirma la capacidad de la operadora de sostener un ritmo de expansión superior al previsto. La firma mantiene para 2025 un plan de inversiones por US$ 1.300 millones, con foco en perforación de nuevos pozos, terminaciones y obras de infraestructura logística.
El CEO de Vista, Miguel Galuccio, explicó que la mejora responde a una combinación de factores, entre ellos la integración de activos estratégicos, la incorporación de tecnología y la eficiencia operativa. La petrolera proyecta alcanzar un EBITDA anual de US$ 1.600 millones, alineando sus objetivos económicos con el aumento de la producción.
La estrategia de crecimiento de Vista también se apoya en un perfil exportador cada vez más marcado. Más del 50% de sus ingresos por venta de crudo provienen de embarques al exterior, lo que convierte a la compañía en un generador clave de divisas para el país. El volumen alcanzado en Vaca Muerta permite ampliar la colocación en mercados internacionales y disminuir la dependencia del mercado interno.
Uno de los factores que impulsaron el desempeño reciente fue la adquisición de los activos de Petronas Argentina, operación que le otorgó participación en bloques estratégicos como La Amarga Chica, donde opera junto a YPF. Esta expansión consolidó su presencia en áreas de alta productividad y fortaleció su portafolio de producción inmediata.
En el plano sectorial, Galuccio estimó que hacia 2030 el complejo energético argentino podría generar un superávit comercial de US$ 30.000 millones, apoyado en el crecimiento sostenido de Vaca Muerta y en la ampliación de la infraestructura de transporte y exportación.
El ejecutivo destacó además el cambio estructural que atravesó la formación neuquina en la última década. “Vaca Muerta hoy es para ingenieros, pero en 2012 era para creyentes”, expresó en alusión al avance tecnológico y al nivel de inversiones que transformaron a la cuenca en un polo no convencional de escala continental.
Con este desempeño, Vista Energy reafirma su estrategia de inversión continua y de fortalecimiento de las exportaciones, consolidándose como uno de los principales impulsores privados del desarrollo energético en la Argentina.