La compañía de mayoría estatal busca traspasar estos activos con casi un siglo de explotación acumulada, confiando en que el conocimiento técnico desarrollado y el respaldo operativo permitirán a nuevos operadores sostener y optimizar su rendimiento. Ambas áreas se convirtieron en casos de estudio por la magnitud de su recuperación mejorada.
El ingeniero Gerardo Tennerini, fundador de la consultora GtoG Energy, evaluó en su informe mensual que estos yacimientos representan ejemplos concretos del potencial de la inyección de polímeros. Este método posibilitó multiplicar la productividad de campos considerados en declino y sostener un nivel competitivo de extracción en un mercado cada vez más exigente.
En el caso de Manantiales Behr, los datos oficiales de la Secretaría de Energía de la Nación correspondientes a mayo muestran un promedio diario de producción de 25.286 barriles, de los cuales el 33,9% provino de la recuperación terciaria. Es decir, 8.586 barriles diarios fueron generados gracias a este proceso de recuperación mejorada que lleva ya cinco años de aplicación sostenida.
Chachahuén Sur también exhibió cifras relevantes: la producción diaria total alcanzó los 11.766 barriles, con un 43,3% originado en procesos terciarios. Según el análisis de Tennerini, el bloque mendocino logró multiplicar por cinco su producción de petróleo terciario, posicionándose entre los diez yacimientos de mayor rendimiento del país, incluyendo aquellos de recursos no convencionales.
La recuperación terciaria, conocida por sus siglas en inglés EOR (Enhanced Oil Recovery), se basa principalmente en la inyección de polímeros que permiten movilizar el crudo residual atrapado en la roca reservorio. Este enfoque se expandió especialmente en la Cuenca del Golfo San Jorge, donde Manantiales Behr lidera las estadísticas, pero también tuvo fuerte presencia en Mendoza y, en menor medida, en Santa Cruz.
Durante mayo, la producción total generada por EOR en Argentina alcanzó un récord histórico de 17.737 barriles por día. Del total, 12.037 barriles diarios provinieron de yacimientos de Chubut, 5.426 de Mendoza y 272 de Santa Cruz, lo que refleja la consolidación de la tecnología como un pilar productivo clave.
En el ranking mensual de GtoG Energy sobre yacimientos con mayor producción terciaria, Manantiales Behr encabezó el listado con 8.586 barriles diarios. Le siguieron Chachahuén Sur con 5.091 barriles, Diadema en tercer lugar con 1.869 barriles (operado por Capsa-Capex), Cerro Dragón con 706 barriles (Pan American Energy) y Escalante-El Trébol con casi 693 barriles diarios (adquirido por PECOM en el Plan Andes).
El especialista destacó que la inyección de polímeros probó ser una alternativa rentable y escalable para prolongar la vida útil de activos convencionales que habían experimentado un marcado declive en su productividad natural. No obstante, advirtió que los nuevos operadores deberán enfocarse en maximizar la eficiencia operativa y el uso inteligente de las tecnologías disponibles para sostener resultados en el mediano plazo.
El desprendimiento de estas áreas ocurre en un contexto de reorganización estratégica de YPF, que busca concentrar inversiones en proyectos de mayor escala o con potencial de exportación, como el desarrollo de Vaca Muerta o iniciativas vinculadas al gas natural licuado.
La transferencia de Manantiales Behr y Chachahuén Sur representa un cambio significativo en la historia de ambos yacimientos, que durante décadas formaron parte de la identidad productiva de la empresa. Con esta decisión, se abre una etapa en la que otros actores privados podrán asumir la continuidad de operaciones.
Tennerini subrayó que el desafío no solo radica en sostener la producción, sino en profundizar el conocimiento acumulado sobre la recuperación terciaria y desarrollar planes de optimización que permitan enfrentar la volatilidad de precios internacionales.
La industria seguirá de cerca la evolución de estos activos, que se convirtieron en referencias técnicas y productivas para el resto de los campos convencionales del país. La experiencia de YPF en la recuperación mejorada deja una base valiosa sobre la que nuevas empresas podrán construir su propia estrategia.