El crecimiento de la producción fue notable: durante 2024, el volumen total de petróleo producido en Argentina creció un 9,9% respecto de 2023. Este avance se debió principalmente al aumento del 27,4% en la producción de shale oil, que logró compensar la caída del 5,5% en la extracción de crudo convencional.
En los primeros cuatro meses de 2025, el país registró una producción promedio de 762 mil barriles diarios de petróleo. De esa cifra, 444 mil barriles correspondieron al segmento no convencional, marcando una suba del 13,9% con respecto al promedio del año anterior. En contrapartida, el petróleo convencional continuó en descenso, con una baja del 2,7%.
Un informe de la consultora Economía & Energía detalló que las diez principales áreas no convencionales representan el 83% del shale oil del país, el 79% de los pozos conectados en 2024 y el 60% de las inversiones en el sector. Este dato refleja una fuerte concentración de recursos en zonas estratégicas de Vaca Muerta.
Entre los desarrollos con mejor desempeño se destacan Loma Campana, La Calera, Bajada del Palo Oeste y Bandurria Sur, todas con incrementos significativos en su producción. Por el contrario, áreas como La Amarga Chica mostraron una estabilidad en su rendimiento, mientras que Cruz de Lorena evidenció una leve caída.
Una de las sorpresas positivas fue La Angostura Sur I, operada por YPF dentro de la concesión Loma La Lata. En pocos meses alcanzó una producción de 17 mil barriles diarios, posicionándose como la sexta mayor área de shale oil del país.
Las inversiones acompañaron este crecimiento. En 2024, las seis principales áreas recibieron U$S 1.166 millones más que el año anterior, representando un aumento del 32%. También creció la cantidad de pozos conectados: de 14 por mes en promedio en 2023 se pasó a 19 en 2024.
Aunque la productividad por pozo no creció en todos los casos, el incremento de las inversiones permitió mantener una evolución positiva del volumen total producido, reflejando un nivel sostenido de actividad.
Para lo que resta de 2025, se anticipa una caída de U$S 383 millones en las inversiones proyectadas, en comparación con el año pasado. También se registra una disminución en la cantidad de nuevos pozos conectados durante el primer cuatrimestre.
No obstante, el informe subraya que el potencial de estas áreas sigue vigente. Son el núcleo del shale oil argentino y determinan no sólo el abastecimiento interno, sino también la proyección exportadora del país.
“La planificación energética del país se estructura alrededor de estas áreas”, concluye el reporte, destacando su importancia en el mediano y largo plazo para el desarrollo hidrocarburífero de la Argentina.
En este contexto, la provincia de Neuquén rompió su récord histórico de producción en mayo con 468.862 barriles diarios, de los cuales más del 95% provienen de Vaca Muerta. Esto representa un aumento mensual del 1,5% y un salto interanual del 19%.
Neuquén concentra actualmente más del 60% de la producción de crudo nacional y mantiene una tendencia de crecimiento sostenido desde 2021, consolidando su liderazgo en el mapa energético argentino.
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