La entidad empresarial, que representa a un sector vital de la economía argentina, señaló que a lo largo de los últimos meses, mantuvo un diálogo constante con el Ministerio de Economía, liderado por el ministro y candidato a presidente Sergio Massa, y la Secretaría de Minería de la Nación, a cargo de Fernanda Ávila. Sin embargo, consideran que la normativa recién promulgada no refleja los acuerdos alcanzados en esas reuniones.
Desde CAEM, se subraya la importancia de que el tipo de cambio destinado a la industria minera sea coherente con el otorgado a otras actividades exportadoras. La minería es un componente fundamental de la economía nacional, situándose como el sexto complejo exportador del país y una destacada fuente de divisas, gracias a su constante superávit en la balanza comercial.
La Cámara advirtió que, para mantener el ritmo de producción y continuar atrayendo inversiones, es fundamental que el "dólar minero" esté disponible para todas las exportaciones del sector, en lugar de limitarse a solo algunas de ellas.
En cuanto a las SIRAS y SIRASE pendientes de aprobación, CAEM considera que su autorización es esencial para garantizar los esquemas productivos de la industria minera.
El comunicado también destaca la necesidad de que la medida abarque a Rocas y Minerales industriales, así como a los minerales metalíferos como zinc, plomo, hierro y cobre. Estos productos generaron exportaciones por un total de USD 132 millones a cargo de las pequeñas y medianas empresas del sector en 2022.
CAEM enfatiza su compromiso con la rápida liquidación de divisas, la reducción de los niveles de stock y la agilización de los procesos de exportación de productos comerciales. Esto se refleja en las cifras, ya que, a pesar de las dificultades experimentadas, el sector minero exportó un total de US$ 2.584 millones en los primeros ocho meses de 2023, superando el promedio de años anteriores.
Finalmente, la Cámara Argentina de Empresas Mineras confía en que las omisiones iniciales en la normativa serán corregidas, permitiendo que la industria continúe contribuyendo de manera positiva a la economía nacional y promoviendo el desarrollo en las provincias, como ha hecho de manera constante hasta el momento.