Desde la ciudad texana, Marín detalló que hacia finales de esta década se espera que Vaca Muerta atraiga inversiones anuales equivalentes a las que realiza una petrolera de escala global, conocida como supermajor, en múltiples países. En este sentido, subrayó que YPF prevé inyectar alrededor de 8.000 millones de dólares por año en el shale neuquino.
Este monto representa aproximadamente el 50% de la inversión total que se destinará a la formación geológica, lo cual posiciona a Vaca Muerta como un proyecto de relevancia global. Marín comparó estas cifras con las de una supermajor, que suele distribuir inversiones similares en entre 50 y 150 países simultáneamente.
“Hay que ir a Vaca Muerta, porque va a haber mucho trabajo, mucha eficiencia para hacer, mucha inversión”, sostuvo Marín frente a los asistentes al evento organizado por la Cámara de Comercio Argentina-Texas. El directivo utilizó estas cifras para generar confianza en el empresariado norteamericano, destacando la magnitud y estabilidad del proyecto argentino.
Durante su exposición, Marín presentó además la nueva visión de gestión de YPF, centrada en la rentabilidad y la generación de valor sostenible. En ese marco, mencionó el programa “4x4”, cuyo objetivo es cuadruplicar el valor de la compañía en tan solo cuatro años.
Otro de los puntos clave del mensaje fue la orientación exportadora de la nueva estrategia. “Tenemos la oportunidad de transformar a Argentina en un país exportador neto de energía”, afirmó. Según estimaciones de la petrolera, para principios de la próxima década YPF podría alcanzar los 30.000 millones de dólares anuales en exportaciones energéticas.
El plan de crecimiento contempla un incremento sustancial en la producción, que permitiría triplicar los niveles actuales gracias a la consolidación de Vaca Muerta como eje productivo central. Este crecimiento no solo busca abastecer al mercado interno, sino posicionar a Argentina como proveedor energético internacional.
Marín también hizo referencia al proyecto de construcción de una planta de gas natural licuado (GNL) en la costa de Río Negro, que abriría una nueva ventana para la exportación hacia mercados estratégicos. Esta obra permitiría monetizar el gas de manera más eficiente y competitiva en el exterior.
Además, el presidente de YPF remarcó la importancia de una comunicación efectiva, tanto dentro como fuera de la empresa, como herramienta clave para impulsar esta transformación. Sostuvo que un mensaje claro y coherente será vital para alinear esfuerzos y captar nuevas oportunidades.
Finalmente, el directivo cerró su participación con un llamado directo al empresariado presente. “Van a ser años gloriosos para todos: para las empresas, para los trabajadores, para el país. Podemos hacer algo extraordinario”, sentenció, instando a las compañías de servicios texanas a sumarse al desarrollo de Vaca Muerta.
El mensaje de Marín no solo busca atraer capital, sino también construir alianzas estratégicas que acompañen el ambicioso plan de crecimiento energético de Argentina. La presencia en Houston refuerza el vínculo con uno de los principales polos petroleros del mundo.
La comparación con las supermajors busca dimensionar el rol que puede tener la cuenca neuquina en el mapa energético global, mostrando que el país tiene el potencial para ser un jugador de peso en la escena internacional.
Horacio Marín aseguró que Vaca Muerta recibirá inversiones mayores a las de cualquier supermajor en el mundo
En el cierre del Bilateral Energy Summit en Houston, el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, lanzó un mensaje contundente a empresarios texanos y neuquinos: “En Vaca Muerta se invertirá más que lo que hace cualquier supermajor en 50 países”. El ejecutivo reafirmó el potencial energético de Argentina y convocó al sector privado a sumarse a esta nueva etapa de desarrollo intensivo.